Más que un saber: Nuestro propio huerto

CÁNDIDO

Hoy hemos hablado en clase sobre Voltaire y su obra Cándido, no la conocía y no me parecía realmente interesante pero después de verme obligada a leerla y a esforzarme por entenderla en clase le he encontrado su propio sentido, una enseñanza filosófica que me atrae más incluso que el primer pensamiento que tuve al leer su argumento original. La idea por parte de Cándido, optimista en toda regla de que vivimos en el mejor mundo posible y es que pocas personas hoy en día piensan así…Al final ha resultado sorprendente y certera, pues para mí su final es más didáctico y real que la idea del libro, sabemos que en la vida no siempre nos veremos recompensados pero eso solo debería suponer una motivación extra por esforzarse por ser feliz y hacer lo correcto a nuestros ojos.

Estos son los ejercicios que hemos trabajado.

1) La frase con la que termina el fragmento es muy importante, ¿Por qué?¿Qué quiere decir con esa frase? Que en la vida para recoger hay que sembrar. Porque es la conclusión de todo el fragmento.

2) ¿Estás de acuerdo con la idea de que vivimos en el mejor de los mundos posibles? Nunca sabemos cuáles son nuestras posibilidades, ¿Quién nos dice que vivimos en nuestra mejor versión posible de la realidad? No podemos saberlo, nunca sabremos nuestro límite y no creo que vivamos en la mejor situación posible, porque incluso en las mejores o peores siempre se puede mejorar, siempre hay otra opción esperándonos.

Su obra “Cándido o el optimismo” fue escrita en su etapa ya madura, de modo que recoge casi toda su experiencia vital y los razonamientos elaborados a los que había llegado con el desgaste del tiempo. Es un libro pequeño en tamaño (apenas 100 páginas), pero inmenso por la hondura con que trata diversos temas claves en el devenir humano.

Habla de las personas de su manera de percibir el mundo y de las posibilidades que le abarcan, creyendo que vivimos en la mejor versión de nosotros mismos.

Cuenta la historia del joven Cándido, joven pupilo de Pangloss, quien se encarga de enseñar al protagonista que el optimismo guía el funcionar de la vida, pues todos vivimos en el más maravilloso mundo posible. Claro que, aprendido esto, Cándido descubrirá a través de una serie de vivencias que ni el optimismo guía el mundo, ni este es precisamente maravilloso.

Como podemos apreciar al final de la obra como metáfora o al menos mi interpretación.

Nuestra misión en la vida es tratar de cultivar (trabajar, esforzarse por mejorar…) para tratar de producir nuestro propio huerto (logro personal) el cual a pesar de todo no tenemos garantizado pues nadie nos asegura que no pueda llevárselo una sequía, una plaga… (Problemas o dificultades en la vida) pero al fin y al cabo es lo único que nos queda, no rendirnos y seguir adelante a pesar de las adversidades.

Aquí os dejo la obra por si os animáis Cándido